El papel de quien participa en una Constelación Familiar en grupo puede variar, pero siempre es significativo. Las motivaciones pueden incluir el apoyo a familiares o amigos, la búsqueda de autoconocimiento y crecimiento personal.
Incluso si alguien participa para ayudar a otra persona, el proceso a menudo conduce a una transformación personal, ya que los participantes se conectan con emociones y recuerdos profundos que los afectan de manera íntima y los lleva a desear comprenderse mejor. Por lo tanto, la participación en constelaciones familiares puede resultar en beneficios personales e ideas inesperadas, independientemente de las motivaciones iniciales.
Cuando una persona participa en una constelación familiar, no son solo ellos quienes experimentan los efectos del proceso. Los familiares y las personas involucradas en la dinámica, incluso aquellos que no estaban presentes en el sistema, también pueden sentir su influencia. Esto se debe a que todos tenemos campos morfogenéticos entrelazados. Por lo tanto, cuando se resuelve una cuestión, se produce una reacción en cadena.
Cuando te apuntas para constelar, estás indicando que deseas explorar una historia o asunto personal de tu vida en la constelación. En este caso, serás el foco de la dinámica y trabajarás directamente en la resolución de tu cuestión específica.
Por otro lado, cuando decides participar sin constelar, tu rol será el de asistir o representar a otra persona en la constelación. Puedes actuar como un representante de un miembro de la familia o un elemento del sistema de otra persona. Esto te permitirá involucrarte en la dinámica sin ser el foco central del trabajo.
Una vez que la constelación familiar termina, lo ideal es que el cliente salga de la sesión y trate de no pensar demasiado en lo que sucedió en la dinámica, evitando comentarlo con otras personas. Es importante señalar que muchas de las informaciones reveladas en el campo morfogenético pueden resultar difíciles de manejar inicialmente.
Cuando nos inscribimos en una Constelación Familiar, el campo de información de todos los participantes comienza a interactuar, activando memorias y desencadenando procesos que se manifestarán durante la constelación. ¡Así es, esto significa que la constelación empieza a tomar forma desde el momento en que nos apuntamos! Esta es una de las facetas más fascinantes de una Constelación Familiar.
También es importante destacar el compromiso que implica, no solo con el espacio y el constelador, sino también con los demás participantes. Dado que una constelación en grupo depende de la presencia de varias personas, es fundamental considerar si podrás asistir a la cita antes de inscribirte. Esto garantiza que el proceso se desarrolle de manera efectiva y se respeten las expectativas de todos los involucrados.
Entiendo completamente que pueden surgir imprevistos en el día de la constelación, como enfermedades u otros compromisos inesperados. Es por eso que he decidido implementar un pequeño cambio para evitar tener que cancelar las constelaciones.
A partir de diciembre de 2023, para inscribirse en las constelaciones presenciales, se requerirá realizar una reserva a través de Bizum de 10€ tanto para aquellos que deseen constelar como para quienes participen de igual manera. En el caso de que no logremos formar un grupo, procederemos con la devolución de ese dinero. Sin embargo, si alguien realiza la reserva y posteriormente no puede asistir, lamentablemente no podremos realizar el reembolso de esos fondos.
Gracias por la comprensión
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